Este circulo de lectura me pareció muy chevere, nos permitió entablar un dialogo ameno acerca de la importancia de valorar el trabajo de la madre en un hogar, cada uno contamos nuestras experiencias y es agradable escuchar diversos puntos de vista. Tuve la oportunidad de llevar a mi hija Sara a este circulo de lectura y pude observar como la literatura puede transformar y cambiar, mi hija es mas colaboradora que antes y le encanta los libros de este autor. Las estrategias que utilizó Adry me gustaron mucho, sobre todo la ensalada que todos como un equipo ayudamos hacer y comimos. Gracias por este tiempo compartido.
Bueno, en éste ejercicio que estuvo a cargo de nuestra compañera Adriana Bojacá pudimos todos los participantes identificarnos con algunos de los protagonistas del libro de los cerdos ya que dentro de la familia tenemos diferentes roles, quiero resaltar el espacio que tienen los buenos sentimientos y valores dentro de los libros de Anthony Browne, creo que es la mejor manera de proyectar a niños y adultos la relación de las historias con las situaciones de la vida cotidiana y de manera individual y colectiva dar solución a los mismos, creo también que es una gran motivación para interesarse por otros libros de éste autor.
Me encantó Adriana, se denotó atención, preparación, una lectura juiciosa... ohh qué bien me están gustando muchos sus círculos y más porque se ponen a comer... ohhh qué rico, esa ensaladita... y todos a cumplir con nuestros papeles para no sobrecargar al otro... ohhh esa mamá cargando con todos en la espalda... llega el momento en que se cansa, a veces así le sucede a uno como maestro... si uno no da responsabilidades a los niños , a los jóvenes, a los adultos ohhh... ohhh términa por sentir que no puede más... Así pues que este libro y la actividad que hicieron nos lleva hacer una reflexión muy importante para nuestras vidas familiares, laborales y como educadores. Y gracias a Sarita por participar en el círculo es muy interesante el compartir de los niños con los adultos. Siempre me ha parecido una fortaleza para el aprendizaje de todos. Por otra parte, hay una corriente pedagógica actual que valora mucho la inclusión de la comida en las prácticas de formación, así pues que cuando uno ve los bananos, las peras, el yogurt, se siente contento pues estos se convierte en una celebración. Muchas gracias a Adriana y a todos porque han hecho de estos círculos una provocación para leer y sonreír
Este circulo de lectura me pareció muy chevere, nos permitió entablar un dialogo ameno acerca de la importancia de valorar el trabajo de la madre en un hogar, cada uno contamos nuestras experiencias y es agradable escuchar diversos puntos de vista. Tuve la oportunidad de llevar a mi hija Sara a este circulo de lectura y pude observar como la literatura puede transformar y cambiar, mi hija es mas colaboradora que antes y le encanta los libros de este autor. Las estrategias que utilizó Adry me gustaron mucho, sobre todo la ensalada que todos como un equipo ayudamos hacer y comimos. Gracias por este tiempo compartido.
ResponderEliminarBueno, en éste ejercicio que estuvo a cargo de nuestra compañera Adriana Bojacá pudimos todos los participantes identificarnos con algunos de los protagonistas del libro de los cerdos ya que dentro de la familia tenemos diferentes roles, quiero resaltar el espacio que tienen los buenos sentimientos y valores dentro de los libros de Anthony Browne, creo que es la mejor manera de proyectar a niños y adultos la relación de las historias con las situaciones de la vida cotidiana y de manera individual y colectiva dar solución a los mismos, creo también que es una gran motivación para interesarse por otros libros de éste autor.
ResponderEliminarGracias Adriana por compartir con nosotros y hacernos llegar este libro al corazón
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ResponderEliminarMe encantó Adriana, se denotó atención, preparación, una lectura juiciosa... ohh qué bien me están gustando muchos sus círculos y más porque se ponen a comer... ohhh qué rico, esa ensaladita... y todos a cumplir con nuestros papeles para no sobrecargar al otro... ohhh esa mamá cargando con todos en la espalda... llega el momento en que se cansa, a veces así le sucede a uno como maestro... si uno no da responsabilidades a los niños , a los jóvenes, a los adultos ohhh... ohhh términa por sentir que no puede más... Así pues que este libro y la actividad que hicieron nos lleva hacer una reflexión muy importante para nuestras vidas familiares, laborales y como educadores. Y gracias a Sarita por participar en el círculo es muy interesante el compartir de los niños con los adultos. Siempre me ha parecido una fortaleza para el aprendizaje de todos. Por otra parte, hay una corriente pedagógica actual que valora mucho la inclusión de la comida en las prácticas de formación, así pues que cuando uno ve los bananos, las peras, el yogurt, se siente contento pues estos se convierte en una celebración. Muchas gracias a Adriana y a todos porque han hecho de estos círculos una provocación para leer y sonreír
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